¿QUÉ HARÁ JESÚS CONMIGO
Al considerar esta pregunta hoy, podemos llegar a una conclusión muy rápida y sencilla. Sólo hay dos opciones posibles. O me recibirá en Su Reino de los Cielos o me rechazará y me enviará al castigo eterno del Infierno. (Juan 5:24-30) : “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a juicio, mas ha pasado de muerte a vida. De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oigan, vivirán. Como el Padre tiene vida en sí mismo, así también le ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo; y también le ha dado autoridad para hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre. No os maravilléis de esto; porque viene la hora en que todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; y los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación. Yo no puedo hacer nada por mí mismo. Según oigo, así juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del Padre que me envió”.
Debemos darnos cuenta de que lo que hacemos con Jesús determinará lo que Él hace con nosotros. Muchos piensan que Dios no destruiría a nadie porque Él es un Dios de amor. Vemos a lo largo de la historia de la Biblia el amor de Dios manifestado hacia Su pueblo, pero también vemos que cuando desobedecieron, Él los castigó. No es diferente hoy. Jesús dijo en (Mateo 7:21) “No todo el que dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor”, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?” Y entonces les declararé: “Jamás os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad”.
Durante las últimas semanas hemos estado estudiando lecciones sobre la autoridad de Cristo. Hemos llegado a darnos cuenta de que Su autoridad está en nuestra vida física diaria, así como en nuestra vida espiritual. ¿Qué decisiones hemos tomado con respecto a Cristo hoy? Vemos a Pilato en (Mateo 27) preguntando: “¿Qué haré con Jesús, llamado el Cristo?” Pilato trata de lavarse las manos de Cristo. La esposa de Pilato trató de disuadirlo de tener algo que ver con Cristo. La gente seguía gritando: “Crucifícalo”. A lo largo de las Escrituras, vemos a personas que toman decisiones que cambiarían sus vidas para mejor o tal vez para peor. (Naamán, el joven rico, José, Abraham, Lot, Moisés). Estos son solo algunos de los que tomaron una decisión que cambió mucho sus vidas. No somos diferentes de los de antaño. Tomamos decisiones con respecto a nuestro servicio a Dios, en función de lo que quieren nuestras familias, nuestros trabajos o nuestras vacaciones. Jesús dijo que debemos amarlo a ÉL más que a nuestra familia. Si amamos otras cosas más que a Cristo, Él dijo que no somos dignos de Él.
¿QUÉ DEBO HACER CON JESÚS?
Jesús se convirtió en el autor de la salvación eterna. (Hebreos 5:8-9) “Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen.” Jesús dio el mandato en (Mateo 28:19-20) de ir por todo el mundo y predicar el Evangelio. Él enseña que Él tiene toda la autoridad. Nos dice que obedezcamos todo lo que Él manda. No solo una parte y no cuando queramos. Debemos obedecer todo el tiempo. En el mandato que dio a los apóstoles, se les dijo que bautizaran a los que creyeran. ¿Ha sido usted bautizado para la remisión de sus pecados? (Hechos 2:38, Romanos 6:3-5 , Hechos 22:16 . En Juan 14:1-6) , Jesús nos dice que ha ido a preparar una mansión para nosotros. “No se turbe vuestro corazón; Creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho. Voy a prepararos lugar. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino. Tomás le dijo: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo podemos saber el camino? Jesús le respondió: Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí.
Si sabes que no eres cristiano, o no has estado viviendo como un cristiano debería, ¿por qué esperas para obedecer a Dios? No seas como Félix, esperando una temporada conveniente. Una canción que cantamos, '¿Por qué esperas?', pregunta: "¿Qué esperas ganar con una demora adicional?". El día del juicio se acerca. Jesús dijo en Mateo 6:33 "Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas". ¿Nos encontrará Jesús preparados, vigilando y esperando como lo estuvieron las cinco vírgenes en (Mateo 25: 1-13) ? Tenga en cuenta lo que dijo Salomón en (Eclesiastés 12:13-14) : "El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios y guarda sus mandamientos, porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, junto con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala". Jesús también nos recuerda en (Mateo 6:33: 12:36) Pero yo os digo que de toda palabra ociosa que digan los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.
Ahora es el momento de preparar a mi amigo para que tu llamado sea firme. Juan escribió en (2 Juan 9) : “Todo aquel que se extravía y no persevera en la doctrina de Cristo no tiene a Dios. El que persevera en la doctrina de Cristo sí tiene al Padre y al Hijo”.
Por: Carlos Benavides
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