IGLESIA DE CRISTO

IGLESIA DE CRISTO
ESTUDIOS BÍBLICOS

miércoles, 15 de diciembre de 2021

DIOS QUIERE QUE TU SEPAS

DIOS QUIERE QUE TU SEPAS...

QUE TE AMA

Hebreos 1:1-2

1:1 Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas,

1:2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;

    Nosotros estamos en la Tierra, Dios está en el Cielo. No tenía necesidad de comunicarse con nosotros excepto por su amor por nosotros. Si hubiera querido castigar o destruirnos, no tenia necesidad de comunicarse con nosotros para hacer eso. Lo pudiera haber hecho en un instante. Pero, tal no es su deseo.

2 Pedro 3:9

El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.

Dios ha mostrado su amor en maneras que deben ser imposibles para nosotros negar.

Romanos 1:19-22

1:19 porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó.

1:20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.

1:21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.

1:22 Profesando ser sabios, se hicieron necios,

Juan 3:16-17

3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

3:17 Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.

 Romanos 8:32

8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos

nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?

    El amor de Dios es comprobado. No tiene que comprobarlo una y otra vez. Un solo evento en la historia del mundo comprobó su amor más allá de cualquier duda. El hecho que todo no está como quisieramos o que no tenemos todo lo que queremos no quita nada de su amor ni lo pone en duda. A los niños a veces se les escucha decir, "¡No me amas!" Esto ocurre aún cuando (o especialmente cuando) un niño haya recibido indicaciones incontables del amor de sus padres.

    El amor de Dios es comprobado por el hecho que el dió lo mejor. Dios no tiene que comprobarlo otra vez por complacer cada deseo nuestro. Porque ya ha dado lo mejor, sabemos que no hay ninguna cosa buena y necesaria que negará a los que están envuetos en llevar a cabo sus propósitos, obedeciéndole por amor. Esta verdad aumenta grandemente la confianza del cristiano verdadero para vivir la vida que Dios nos ha señalado. Puede saber que como dice en el Salmo bien conocido, "Jehová es mi pastor; nada me faltará." Salmos 23:1

Nada puede ser más claro. ¡Por esta razón murió Cristo! El pecado había separado entre Dios y nosotros.

Isaías 59:1-3

59:1 He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha

agravado su oído para oír;

59:2 pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro

Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír.

59:3 Porque vuestras manos están contaminadas de sangre, y vuestros dedos de

iniquidad; vuestros labios pronuncian mentira, habla maldad vuestra lengua.

    Dios es santo. No hay pecado en él. La naturaleza misma del pecado en sí es completamete repugnante a él. No puede tolerar ni vivir con el pecado. Nuestro pecado estaba entre nosotros y Dios. Cristo se dio a sí mismo para quitarlo de en medio. La gracia de Dios no debe usarse como una excusa para continuar pecando, más bien, nos muestra que debemos dejarlo.

Tito 2:11-14

2:11 Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los

hombres,

2:12 enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos,

vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,

2:13 aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de

nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,

2:14 quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y

purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.

Esta es la verdad central de todo lo que Dios nos dice. Cualquier practica religiosa que no tiende a hacernos más como Dios no solamente es inútil, sino es en actualidad en contra de Dios, no importa cuan piadoso o correcta apariente ser.

2 Pedro 1:2-4


1:2 Gracia y paz os sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús.

1:3 Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido

dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó

por su gloria y excelencia,

1:4 por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para

que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo

huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;

    Ser participante de la "naturaleza divina" quere decir ser como Dios. Las promesas de Dios hace posible que tengamos suficiente confianza para obedecer sus instruciones y llegar a ser como él en lo que decimos, hacemos, y pensamos. Hay movimientos "religiosos" que enseñan un concepto equivocado de la gracia, diciendo tales cosas como , "Somos humanos" o "Todos nosotros pecamos." Mientras que no podemos negar la veracidad de cualquier de estas declaraciones, lo que no se puede pasar por alto es la manera que se están empleando para dar la idea que no tenemos que cambiar la vida ni hacer nuestra parte para evitar el pecado. Pensando en esta forma, la persona puede sentirse "religiosa", pero no cambiar lo que hace.

    Tal concepto de la gracia de Dios es contrario al propóstito mismo de la religión -- el hacernos como Dios. El Espíritu reveló por medio del apostol Pedro que nuestra libertad no debe ser usado en esta forma.


1 Pedro 2:16


"...como libres, pero no como los que tienen la libertad como

pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios."

    En Romanos 6:1-2, este mismo principio es expresado en otra forma:

6:1 ¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia

abunde?

6:2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo

viviremos aún en él?

    En realidad, la gracia de Dios nos enseña negar a la impiedad y a los deseos mundanos. ¡Esto está muy lejos de solamente continuar pecando y decir que Dios nos perdonará por medio de la sangre de Cristo vertido en la cruz! Continuar pecando en vez de cambiar la vida, cuando ya conocemos la verdad, se describe en la palabra de Dios como:

         Pisar al Hijo de Dios

         Tratar la sangre de Cristo como cosa inmunda

         Tratar con desprecio el Espíritu de Gracia.


Hebreos 10:26-29

10:26 Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el

conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados,

10:27 sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de

devorar a los adversarios.

10:28 El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos

muere irremisiblemente.

10:29 ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de

Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e

hiciere afrenta al Espíritu de gracia?

    El simplemente usar la sangre de Cristo como un trapo sucio para limpiar extravagancias y faltas de una vida demasiado dado a sus propios deseos y propósitos no haría nada para cambiar a uno para que sea más como Dios. Dios nunca tolerará tal mal uso de su gracia, y los que creen que lo hará están engañándose a sí mismos, y si siguien así, recibirán el castigo mayor mencionado en la escritura que anteriormente terminamos de considerar.

    Fíjese de la exortación por medio del apóstol Pablo en Romanos 12:1-2:


12:1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis

vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro

culto racional.

12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la

renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena

voluntad de Dios, agradable y perfecta.

    Dios quiere ver la transformación de sus hijos por medio de un cambio en su modo de pensar. Nos mostrará el camino y lo hará posible si estamos con voluntad de obedecerle por medio de nuestra confianza en él.

   Por : Carlos Benavides

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

PASTORES APROBADOS POR DIOS

PASTORES APROBADOS POR DIOS  Hay pastores en la mayoría de las iglesias. Mucha gente aspira al puesto de pastor. Bíblicamente, el papel de l...